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miércoles, 2 de enero de 2013

Reciclando la comida

En estos tiempos de crisis que muchos estamos viviendo, con tantos despidos laborales y recortes salariales, en muchos hogares es necesario ahorrar hasta la última moneda, por ello se impone el buscar opciones para aprovechar al máximo todo lo necesario.
No es ninguna novedad cocinar con restos de otras comidas, desde siempre se han aprovechado las sobras de otros platos que nos daba pena tirar a la basura, pero hoy revueltos, purés, potajes, cremas, ensaladas, pasteles salados, quichés, budines y muchos más cocinados con las sobras son la solución, sólo hay que tener un poco de imaginación y sobre todo, la certeza de que aquí se aprovecha todo.
Lo importante es no desperdiciar la comida y aprovechar al máximo lo que se tiene para poder ofrecer una alimentación completa, variada y nutritiva a toda la familia. Es fácil sí al planificar los menús de la semana dedicamos al menos un día a cocinar los restos, sobras y productos a punto de caducar que se nos han ido quedando. Con un poco de imaginación es posible.


Arroz cocido: Puedes utilizarlo para ensaladas de arroz o para acompañar carne, pescado o pollo mezclándolo con otros ingredientes. Sí le pones queso rallado, de varios tipos a ser posible, albahacaoréganotomillo, ajo y un chorrito de aceite, al microondas un minuto y tendrás un rico risotto. A los niños les gusta mucho el arroz a la cubana.
Caldos: Prepara comidas en las que puedas usar las sobras crudas de marisco, carne y pescado, para hacer sopas y cremas o paellas.
Croquetas y canelones: Desmenuza los restos y mezclalos con bechamel para unas ricas croquetas. Prepara el relleno de unos deliciosos canelones con restos de carnes, pescados, mariscos o verduras.
Frutas: Las piezas maduras sirven para purés, agua, mermeladas o postres como tartas, budines, pasteles o cakes.
Galletas: Se pueden partir en trozos y utilizar como topping de helados, natillas o yogurt, moler, mezclar con mantequilla y preparar bases para tartas.
Garbanzos: Se pueden hacer purés, condimentar y utilizarlos como dip; hacer cremas o hummus; incluirlos en potajes, platos de carne, pollo, ensalada o simplemente encebollados (sofreír bastante cebolla, un par de dientes de ajo y orégano, tomillo y laurel, añadir los garbanzos); también puedes preparar una rica ropa vieja.
Guisos: Se pueden revolver con sopa de pasta o utilizarlos para rellenar verduras; preparar empanadillas, empanadas, pasteles salados, quichés o incluso hacer unos saquitos y rollitos de pasta brick.
Pan: Es fundamental en la mesa de muchísimos hogares, blanco, integral o dulce siempre está presente, pero facilmente se pone duro, en vez de tirarlo se puede rallar para empanar; rebanar y hacer unas torrijas, hornear solo o con aceite de oliva y ajo o tomate para acompañar pastas o cremas o utilizar para preparar sopa de pan; se tritura con unos tomates pelados y un diente de ajo, se aliña y tenemos un rico salmorejo o puedes aprovecharlo para hacer un nutritivo gazpacho; en el caso del pan de dulce, se puede juntar todo el sobrante y preparar budín de pan. Podemos cortarlo en cubitos y freírlo para hacer unos croûtons para acompañar sopas, cremas o ensaladas.
Pasta: Con restos de pasta mezclados con unos huevos batidos, un poco de leche y queso rallado, añadimos bacon o jamón york picado (sí no lo lleva ya) condimentar con especias y rectificar el punto de sal, meter al horno hasta cuajar y tendremos un estupendo pastel que puede comerse caliente o frío.
Patatas cocidas o fritas: Para hacer una tortilla; con restos de patatas cocidas puedes preparar un puré de patatas, una ensaladilla rusa o una alemana.
Pollo asado: Se incorpora a una ensalada con piña y maíz o se cocina con un poco de nata y vino. Para preparar croquetas, rellenos, sandwiches fríos, bocadillos e infinidad de platos pues el pollo asado tiene muchos usos en la cocina.
Queso: Es un alimento caro pero delicioso que en poco tiempo empieza a quedarse duro. En lugar de tirarlo puedes rallarlo o acumular unos cuantos restos para hacer una fondue.
Verduras: Los restos de verduras guisadas o asadas podemos aprovecharlos de muchas maneras, para hacer tortilla, frittata, revueltos, cremas y purés o añadirlos a una fritura para hacer otro plato. Las piezas de verduras o vegetales que ya no están tan frescas se pueden utilizar en una sopa o crema.
YogurtLos que están próximos a caducar se pueden congelar y posteriormente comer como postre o utilizarlos como aderezo o como ingrediente de algún bizcocho o cake.

Recetas con sobras y restos
Garbanzos con verduras al curry
Un plato preparado con verduras que no aguantarían mucho más y un bote de garbanzos a punto de caducar. El resultado fue una especie de pisto con garbanzos y un toque de curry, buenísimo.

Ingredientes:
1 cebolla.
2 dientes de ajo.
2 calabacinos.
1 berenjena.
1 pimiento verde, rojo o amarillo, el que tengas.
2 champiñones.
1 lata de tomate triturado.
1 bote de garbanzos con su agua.
Orégano.
Albahaca.
Tomillo.
Pimienta mezcla de bayas.
1 cucharada de curry.
Sal.
Aceite de oliva.

Preparación:
Lavar, pelar y picar toda la verdura. Sofreír con aceite de oliva, la cebolla, el ajo y el pimiento hasta que estén tiernos, agregar entonces los calabacinos y dejar pochar, añadir la berenjena y los champiñones cortados en láminas, dejar hacer y echar el tomate triturado y las hierbas, salpimentar. Una vez hecho el tomate agregar los garbanzos con su agua, espolvorear el curry, remover bien y cocinar unos 10 minutos a fuego medio hasta que los garbanzos estén muy tiernos, impregnados los sabores y aromas y la salsa hecha. Servir.

Budín de pan
Un riquísimo budín aprovechando los restos de pan de varios días.

Ingredientes:
4 panes duros sin corteza.
1/2 l de leche.
1/4 k de azúcar.
4 huevos.

Pasas.
Cerezas en almíbar.
Ralladura de 1 limón.
1 bote de nata líquida para cocinar.


Preparación:
Se remoja el pan en la leche hasta que se haga una masa y se deja reposar un par de horas. pasado el tiempo de remojo se le añaden los huevos, el azúcar, la ralladura de limón y la nata.
Se pasa todo por la batidora, se añaden las pasas y las cerezas escurridas del almíbar, se vierte todo sobre un molde caramelizado.
Se pone al horno medio, al baño María hasta que cuaje, aproximadamente 45 minutos ó 1 hora dependiendo del horno, comprobar con una aguja de punto.
Dejar reposar y desmoldar.

Bizcocho con crema pastelera
Esta receta con restos de bizcochos es de Juanfra del blog La cocina de Morilands, la hicimos y el resultado fue estupendo.

Ingredientes:
Bizcocho (del que dispongas en ese momento).
Almíbar para bañar bizcochos (130 gr de azúcar, 100 gr de agua, zumo de medio limón, 2 cucharadas de licor)
Crema pastelera (100 gr de azúcar, 500 gr de leche entera, 50 gr de maizena, 3 huevos, 1 cucharadita de azúcar vainillado)
Almendras caramelizadas.



Preparación:
Sí tienes restos de algún bizcocho que aún esté bueno, aprovéchalo. Corta trocitos del tamaño de los envases donde lo vayas a poner e introduce en el fondo de los recipientes ajustándolo bien.
Prepara el almíbar: vierte el agua, el azúcar y el limón y programa 7 minutos, 100º, velocidad 2. Retira y reserva en un bol y perfuma con el licor que más te guste (cointreau, ron…).
Ve mojando con el almíbar sobre el bizcocho, apretando un poco para que cale bien.
Prepara la crema pastelera: introduce todos los ingredientes de la crema en el vaso de la Thermomix y programa 7 minutos, 90º, velocidad 4. Una vez pasado el tiempo, retira del vaso y vierte sobre un bol grande o en una manga pastelera.
Repártela sobre el bizcocho mojado, dando la forma que quieras ayudándote con las boquillas sí usas la manga.
Con una brocha de silicona, pincela con un poco de almíbar la crema pastelera.
Espolvorea unas almendras caramelizadas por encima.
Deja enfriar a temperatura ambiente y después pásalos al frigorífico.